domingo, 29 de abril de 2007

DE LOS EUROS AL INFIERNO


Sinceramente, esta vez no sé como empezar ésto, que, podría llamarse artículo, pero es que me parece una palabra demasiado grande para lo que yo hago aquí.

También podría empezar por disculparme por la tardanza, una semana sin aparecer, cuando yo había dicho… Bueno, lo que importa es que estoy aquí otra vez, que no les he olvidado, y ¿ustedes a mí? Ay, espero que no; pero es que anduve en casa de “obras menores”, pero obras, ¿será por contagio? Bueno, y además que sigo medio colgada con Internet, aún estoy esperando que me vengan los de Telefónica a instalar la línea y a ponerme en condiciones lo del ADSL; ya le podían haber puesto otras siglas, caray, algo que se pudiera pronunciar mejor, que a mí esas me suenan mal, como a droga, o algo así. Claro que, mirándolo bien, esto engancha, ya lo dicen los expertos: “Que Internet puede crear dependencia”. Pues como todo en la vida, digo yo, lo bueno o engorda o es pecado, miren ustedes eso es un dicho muy viejo, así que no nos vengan ahora contando milongas.

Ven ustedes, ya me he liado con tonterías, y aún no he entrado en materia, y no será porque la semanita no esté plagada de noticias, eh, de esas sabrosas, y que te hacen dar un respingo y hablar con la tele -al menos yo lo hago- mis hijos dicen que estoy loca, que si será la menopausia, que me como demasiado el tarro, uffff, y más “lindezas” parecidas. Pero es que como se le queda el cuerpo a una cuando oyes decir a alguien que cobra al mes: ¡8000 euros! Y eso sólo por darle a la lengua y poner verde a los demás. Ustedes ya saben por donde voy, seguro. Pero es que esta servidora que tiene que estirar cada euro como si fuera de goma para llegar a fin de mes, no se puede ni imaginar lo que puede ser cobrar semejante cantidad sólo por criticar y por la llevar la contraria. También hay que tener un par de “narices” para decirlo así, al descubierto, sabiendo la polémica que esto iba a traer. Yo no sé si esta confesión del Sr. Rajoy habrá sido o no acertada. Según se mire, puede ser tirar piedras contra el propio tejado o puede ser que él como persona haya ganado puntos por no ocultar una verdad, que en teoría puede perjudicarle, pero me pregunto: ¿Cómo habrá sentado en el Partido? Porque los españolitos de a pie o de autobús o de metro, ¿qué nos preguntaremos ahora a la hora de ir a votar? ¿De dónde salen esos 5000 euros que cobra un solo señor, más todos los que cobrarán los demás? De los socios, etc, me imagino yo, pero ¿y qué pensarán ahora los socios? Bueno, pues yo me he quedado sin habla, la verdad, y, pensándolo fríamente, a mí, por ese dinero, no me importaría defender a capa y espada a cualquier partido político, ya sé que eso no es muy ético, pero, total hoy en día no hay diferencias, no hay izquierdas ni derechas, no hay nadie del Centro-centro, porque todos lo son, en mi humilde opinión tanto los partidos como los candidatos son “desaboríos”, como muy “Light”, lo que pasa que en vez de ser bajos en calorías son bajos en espíritu, no sé, es como si no tuvieran enganche, carisma, que se dice ahora, tal parece que se limitan a aguantar el tipo hasta la hora de cobrar y luego viven su vida tan felices, ¡no te fastidia!, yo con esos sueldos viviría superfeliz, ¿ustedes no?

Ah, de otra cosita que quiero hablar, a riesgo de ser pesada, pero es que tampoco tiene desperdicio la noticia: ¿Se acuerdan ustedes de que yo les comenté que estaba muy contenta porque ya no teníamos Limbo? Bueno, pues está claro que “poco dura la alegría en casa del pobre” porque ahora es peor: ¡Ahora tenemos otra vez Infierno! ¡Vaya por Dios!, y nunca mejor dicho, que dice el Papa que existe el Infierno, que sí, que está ahí, vamos, que haberlo, “haylo”. Ven ustedes, lo que yo decía de los mundos virtuales, si es que son como niños jugando con la consola o con el ordenador quitando programas o juegos que ya les cansan para volver a rescatar y añadir otros más antiguos y que ya estaban olvidados.

Aysss, si Dante levantara la cabeza y escribiera ahora sobre todo esto, seguro que haría un buen best seller, yo no sé si lo titularía La Divina Comedia o la Comedia Divina, pero a mí, la verdad es que, lo que me parece es un cachondeo, eso sí, lo de divino, no lo niego.

Ahora yo estoy preocupada y me queda una duda: ¿Qué pasa con el Purgatorio? Seguimos teniéndolo o se ha ido también al Limbo con el ídem.

¡Ay, Señor! Habrá que esperar y tener los oídos bien abiertos, porque a veces… ¡Lo que hay que oír…!

Emma Rosa

sábado, 21 de abril de 2007

DE OBRAS PÚBLICAS Y ELECCIONES

DE OBRAS PÚBLICAS Y ELECCIONES

¡Hola, a quién haya por ahí! Una servidora ataca de nuevo con sus opiniones y sus cotilleos personales.

Seguro que más de una se habrá pensado, al ver que yo no aparecía por aquí, que ya me he cansado, o algo parecido. Pues no, no es eso. Verán ustedes ya les prevengo desde ahora para que no haya equívocos, eso forma parte de mi personalidad: Soy muy inconstante, lo reconozco, o indisciplinada, o llámenlo como quieran, no puedo prometer que voy a escribir todos los días, para prometer ya están los políticos, que luego no cumplen, pero prometer, lo hacen divinamente. Yo calculo “articulear” dos o tres veces por semana, ¿les parece bien? Ay, ¿a qué me recuerda a mí esto? Ah, ya sé, a las famosas encuestas, ésas que hacen de vez en cuando sobre la vida sexual de las parejas.

A saber: “Los españoles hacemos el amor una media de dos-tres veces por semana”. Buenoooo, los habrá que lo superen y otros que no llegan ni a una, vamos, digo yo, porque si yo les contara… No, no hablo de mi vida íntima, eh, Dios me libre, pero a juzgar por lo que oigo a través de las paredes de mi casa… Uhhhh, sudores, a veces, me entran de escuchar “ciertas cosas”… Mejor corramos un tupido velo y hablemos de otra cosa, no vayamos a liarla…

Y hablando de liarla: para lío, lío, el que hay montado por las calles, al menos por las de mi pueblo o de mis dos pueblos, mejor dicho (otro día les contaré porqué tengo dos). Tan lío es, que hoy volví de la compra muyyyy cabreada, con el carrito cargado a tope sorteando agujeros, atravesando pasarelas improvisadas sobre zanjas y haciendo malabarismos para que no me atropellaran los coches porque no sé que tuberías están metiendo y las aceras han desaparecido, en fin que ustedes ya me entienden, seguro que están sufriendo situaciones parecidas en media España, ¿por qué seráaaa? No quiero ser mal pensada, ups, pero ¿creen ustedes que tendrá algo que ver con las Elecciones que se avecinan? Es que siempre pasa lo mismo, lo dejan todo para última hora, lo de las obras digo, y luego ¡hala, todo de prisa y corriendo! Y terminarán colocando las baldosas a marchas forzadas para inaugurar antes de la campaña electoral, y ya se sabe, a los cuatro días se empiezan a despegar y cuando llueve y pisas la baldosa suelta… Uffff, se te cuela el agua por dentro del pantalón, ¿qué bien sienta, verdad? Te acuerdas del Sr. Alcalde y de toda su parentela por no haber hecho las cosas a conciencia y a su debido tiempo. Que ha tenido usted cuatro años para hacerlo, hombre; ya se sabe que “las cosas de Palacio van despacio” pero las de los Ayuntamientos, decir que van a paso de tortuga es ser muy optimistas, ¿o no? En fin, paciencia, y que no corra demasiada sangre cuando los mítines nos empiecen a martillear por todos lados.

De otra cosa que yo les quería hablar hoy, es de la Iglesia, y es que la noticia es de las que te dejan alucinando, dudando de tus facultades auditivas: “Las autoridades eclesiásticas han decidido suprimir el “limbo”. yo la verdad es que me alegro, a mí esa palabra nunca me gustó, me suena como a estar perdido por el espacio, dando vueltas como un astronauta que se hubiera caído de la nave, y sobre todo, teniendo en cuenta que los que iban allí eran los pobrecitos niños que se morían sin bautizar, angelitos, qué daño habrían hecho ellos para tener semejante destino. Ya ven ustedes, digo yo que si estarían aburridos o no tenían otra cosa mejor que hacer, y se han quedado tan contentos, oiga. Ays, y nosotros que pensamos que el mundo virtual se inventó con Internet, pues no, resulta que los curas ya se nos habían adelantado… ¡Ay, Señor… A veces… Lo que hay que oír…!

Emma Rosa

martes, 17 de abril de 2007

COSAS DE POLÍTICOS

COSAS DE POLÍTICOS

Buenassss. Aquí estoy otra vez. Lo primero que quiero hacer es dar las gracias a todos los que entraron en mi blog y me dejaron sus mensajes de apoyo y buenos deseos.

Ahora, si hay alguien por ahí, dirá: ¡Bah, seguro que son un puñado de amigos suyos que lo han hecho por puro compromiso”. Y yo le contestaría: Pues sí, mire, está usted en lo cierto, son un puñado de amigos, ¡y a mucha honra! , que esta vez sí que lo digo con convencimiento, y si fue o no por compromiso, es lo de menos, lo que importa es que se han tomado la molestia y me han dedicado unos instantes preciosos de sus vidas.

Bueno, cumplida ya la obligación, -no se crean que siempre voy a dedicarles tantas líneas de agradecimiento, eh, esto es por ser la primera vez- entraré en otras materias, porque a veces se oye cada cosa, que a una se le descuelga más la barbilla de lo que la tiene, y no sólo por la gravedad si no por esas noticias que escuchas así de refilón y hace que te quedes con el plato en la mano a medio fregar o algo parecido de la impresión.

Y, es que no es para menos la cosa, cuando oyes así de repente decir al presentador del telediario que los del PP han encargado a una imprenta que les hicieran 1000 copias de formularios oficiales para votar por correo en las Elecciones, ¡toma castaña! Y digo yo, eso no sé si será falsificación de documento público o algo así, pero si no es un pirateo es algo muy parecido o ¿no? Luego nos dicen a nosotros que no pirateemos, que es un delito, ¡no te fastidia! Ah, y para defenderse va el Acebes y dice, como restándole importancia, oiga, “que no hay porque asombrarse que es una práctica muy habitual”. Pero ¿qué me está contando hombreee? ¿Acaso me está diciendo que ya lo han hecho más veces? Ayayayay, yo no doy crédito a mis oídos, pero ¿quién le hace los discursos a este señor para confesar semejante burrada? Esas cosas si se hacen no se dicen, caray, que lo está usted estropeando en vez de arreglarlo, pues vaya un político que está hecho, Señor Acebes, fíjese, que hasta yo me doy cuenta de que ha metido usted la pata, y eso que no soy muy entendida en estas cuestiones.

¡Manda güevos! que diría el Sr. Trillo. Se acuerdan de aquello ¿verdad? Ese señor sí que me gustaba a mí, ya me caía bien antes, pero después de soltar la frasecita en el Congreso y quedarse tan fresco… Claro que él creía que el micrófono estaba cerrado, pero otro en su lugar no sé como hubiera reaccionado, él, ya no recuerdo si pidió perdón, pero la sonrisa de picarón le quedó de cine y no se acongojó nada, pues desde ese día pasó a ser mi político preferido. Lo de menos es el partido de donde se sea, en todos los sitios cuecen habas, o lo que es lo mismo en todos los bandos hay gente simpática y gente estúpida. Y no hay partido político que no tenga su hombre guapo y su hombre feo, en el Gobierno, por ejemplo, -según mi opinión, evidentemente, que habrá para todos los gustos- el que ejerce de guapo, por decirlo de algún modo es el Presidente, y el feo, ése otro que siempre es el que da la cara, y en cambio en la oposición es justo al revés, me pregunto si será por aquello de llevar la contraria también en eso.

En fin, que voy a ir cortando por hoy, quería haber contado más cosas mías, pero me enredé con los políticos y sus historias. Así que la próxima vez no hablaré del Gobierno, o sí, vaya usted a saber… Porque a veces lo que hay que oír…

Emma Rosa

lunes, 16 de abril de 2007

Me presento: Simplemente Emma

¡Toc, toc! ¿Hay alguien ahí?... Esto es como hablarle a un contestador, nunca sabes si van a escuchar el mensaje que les dejas y te quedas pensando y mirando al teléfono con cara de estúpida, dudando entre hablar o llamar más tarde.

En fin, tampoco voy a preocuparme mucho, porque, digo yo, que las opiniones de un ama de casa, me da a mí, que no van a interesar a tanta gente, así es que si las lee alguien será de pura casualidad con tanto y tan interesante como hay en Internet…

Me presentaré: Soy un ama de casa. Ya está, ya lo he dicho. Ahora debería añadir aquello de: “Y a mucha honra”, ( y una m…) mentira, una grande y enorme mentira. No hay cosa más aburrida que ser ama de casa, todos los días del año haciendo lo mismo, y para qué, para que luego te lo deshagan los demás. Ya lo dicen mis hijos cuando les mando hacer su cama: “¿para qué, mamá, si la voy a volver a deshacer?” y tienen razón, claro, pero cuando una –a veces una es tonta y no lo puede remediar- se la hace, bien colocadito todo, pues ellos no protestan ni te dicen que es tontería, noooo, sólo es una tontería si la tienen que hacer ellos.

Bueno, a lo que iba, a mí, en realidad lo que me gustaría es tener una carrera: ser médica o abogada o ejecutiva, o periodista de estas que salen en la tele, siempre tan monas y tan bien peinadas y maquilladas, claro, como es gratis, así cualquiera. Pero me he quedado en el Bachiller, eso sí, el bueno, el de antes y no lo que hay ahora: dos años y ¡hala!, el título de Bachiller en el bolso, ah, y la P.A.U., ¿qué bien suena, verdad? Yo pensaba que era un curso entero de preparación para la Universidad, como el PREU o algo así, pero no, son unos días y una simple prueba de acceso, vamos, lo que antes se llamaba Selectividad, que no sé porqué le habrán cambiado el nombre si es lo mismo.

Por si no lo he dicho: tengo marido también, además de dos hijos adolescentes, la parejita, vaya; un piso y un coche, ya ven ustedes, el lote completo, lo que se llama “el sueño americano” pero a lo español. Y soy ama de casa, gobernanta, directora de hogar, “chica-para-todo”, llámenlo como quieran, yo, ya lo tengo asumido.

Pero eso era antes, antes de que yo descubriera las posibilidades de la informática, ahora, ya no soy la misma, nooooo, ahora soy otra mujer, que decía una canción. Desde que me apunté a un cursillo de Internet en el Telecentro para entretenerme por las tardes, allí aprendí que hay otro mundo más allá de las paredes de mi casa y de la pantalla de la tele.

Aunque siempre me gustó leer, eso sí, vivir otras vidas a través de los libros es muy divertido e interesante, pero Internet… es … el no va más. Esto de darle a un botoncito y estar en contacto con el mundo entero. Y chatear, buenoooo, ríete tú del critiqueo de cuatro amigas tomando café que se estilaba antes, esto de ahora, esto sí es tener el mundo a tus pies, mejor dicho en tus manos, por lo del tecleo lo digo, que una servidora en sus años mozos hizo sus correspondientes cursos de mecanografía hasta las mismas vísperas de su boda, y mira por donde, de secretaria jamás obtuve un puesto, pero tecleo que es un primor.

En fin, ya me he presentado, aunque me quedan por decir muchas cosas, pero habrá tiempo para todo, para contar y para opinar, que de eso se trata este blog, ¡qué bonito suena! Y además es mío y puedo escribir lo que me de la gana.

Bueno, termino ya, por hoy. La próxima vez intentaré que sea algo más interesante, y es que hay muuuucho de que hablar y opinar, porque… ¡Lo que hay que oír a veces…!

Emma Rosa