domingo, 20 de mayo de 2007

MUNICIPALES Y AUTONÓMICAS O ¿ENSAYO GENERAL?

Hoy, quiero protestar, ya sé que siempre hago lo mismo y les resultaré aburrida, quizá sea por contagio de estar oyendo a mis hijos quejarse de todo, pero, para una vez que puedo hacerlo yo, voy a aprovechar la ocasión…, nadie me va a escuchar, pero, ¿y lo que desahoga decir lo que se piensa? Lo a gusto que se queda una después, eso vale un mundo, que se lo digo yo.

Lo dicho, vamos a la protesta: Yo me pregunto, y llevo unos días dándole vueltas al asunto, ¿qué tipo de Campaña electoral estamos teniendo? No sé ustedes, yo, hay veces que me siento confundida. Estamos a punto de celebrar unas Elecciones, pero, ¿a quéeee? Si vamos a elegir Alcaldes y Presidentes autonómicos ¿qué rayos pintan continuamente bombardeándonos con sus historias Zapatero y Rajoy? Vamos a ver, señores, a mí como ciudadana de este país, en este momento no me interesan en absoluto sus discusiones, sus chistes malos, sus salidas de tono y todas las “lindezas” que se puedan decir el uno al otro. Y, ¿saben por qué no me interesa? Porque después del día 27 de mayo ustedes dos van a seguir sentándose en sus escaños del Congreso como si no hubiera pasado nada, van a seguir discutiendo más de lo mismo, y no se van a acordar de todo lo que prometieron en las ciudades y regiones por donde pasaron; en cambio para mí, para el resto de los ciudadanos, ya no será igual; nosotros y nuestros intereses ya no dependerán de las mismas personas.

Quizá salga reelegido el Alcalde anterior y si era buena persona, honrado y decente y además hizo mucho por su Concejo, estupendo y enhorabuena, y si el próximo es otro distinto, pero mejor, pues también enhorabuena, y si sale “rana” (con perdón, pero ustedes me entienden) pues empiecen a acostumbrarse a oír el nombre de su pueblo en las noticias y a tener a los reporteros alrededor.

Y quien dice en La Alcaldía dice también en La Presidencia de la Autonomía correspondiente.

Eso es lo que me interesa ahora, conocer a los Candidatos de AHORA, escuchar lo que me ofrecen, saber si van a arreglar las aceras, mejorar las carreteras, las infraestructuras, las comunicaciones, ampliar presupuestos para becas, para educación, para sanidad… y un montón de cosas más, como la intendencia doméstica pero a lo grande. Eso es lo que a nosotros realmente nos interesa.

Sin embargo, tal y como nos presentan la Campaña en la televisión más parece que estuviéramos asistiendo a unas Generales, o al menos yo, la veo como si fuera una especie de ensayo general y me digo ¿no podrían ustedes esperar su turno? Que ya les tocará la vez, caray, que, como dice el refrán: “a todo gocho le llega su San Martín” (ustedes perdonen la comparación) pero, creo que se están adelantando, que su función aún no ha comenzado y que tendrían que esperar al año que viene, ahora debieran ceder el protagonismo a quién de verdad lo necesita. Yo comprendo que, como presidentes de los partidos, tienen ustedes que apoyar a sus representantes, faltaría más, pero con un apoyo moral que les respaldara sería suficiente, y opino que con su presencia, sus sonrisas y su aplauso, bastaría. Ahora mismo, Sres, no nos importa saber si sus principios son buenos o malos, muchos o pocos; con conocer los de nuestros futuros Alcaldes y Presidentes autonómicos ya estamos servidos de momento, los suyos guárdenselos para intervenciones futuras que les harán falta y vayan haciendo acopio de chistes, refranes, proverbios, y demás parafernalia que, cuando llegue su momento, estaremos encantados de oírles, reírles las gracias –si las hubiera- y asistir a sus shows (perdón, quería decir mítines) para escuchar sus memorables frases: “dale caña, dale caña” ¿se acuerda usted Sr Rajoy? Por aquel entonces ya le dije que me recordaba a Groucho Marx con su “más madera, más madera” y mire por dónde el otro día lo nombró usted al hablar de “sus principios”, usted me perdonará pero las comparaciones a veces son odiosas y sinceramente creo que como cómico no le llega usted ni a la altura del “bigote”, así que si quiere emular a uno de los Hermanos Marx quizá sería preferible que se limitara a imitar a Mudito que igual es más asequible a sus posibilidades y a su personalidad y a lo mejor así, por una vez, yo ya no tendría que decir aquello de ¡Ay, Señor… Lo que hay que oír…!

Emma Rosa

sábado, 12 de mayo de 2007

DE QUEJAS Y TELECOMUNICACIONES



Por aquí me ando otra vez. Con retraso, ya lo sé, pero espero que ustedes sabrán disculparme. Ay, que tengo yo miedo de estar contagiándome con los políticos, que yo también empiezo a prometer y a no cumplir. A ver si ya me está afectando la campaña electoral, si acaba de comenzar y ya estoy confundida con tantas ideas de ida y vuelta.

Bueno, pues les voy a contar que mi campaña personal en este momento, no tiene nada que ver con la política del país, vamos que no voy a presentarme a nada, no estoy tan loca, aún, o tan cuerda, ¿quién sabe como hay que estar para hacerlo?

Bien, les hablaba de mi campaña, o de mi lucha, por decirlo de otro modo, que no es otra que la “pelea” que me traigo con los de Telefónica para que me vengan a instalar la línea, el Imagenio de marras y el ADSL ése tan rápido que dicen ellos que tienen, aysss, como luego vaya a la misma velocidad con la que me están tardando en tramitar todo el papeleo…

El asunto es que los comerciales del número de atención al cliente -suena muy bien, pero ustedes no se fíen, eh-, que la atención que te prestan es muy relativa; caso, lo que se dice caso, mucho no te hacen, ahora sí, el trato es de “usted con el Doña delante de tu nombre”, lo que no impide que en cuanto dices que quieres poner una queja por la tardanza y el incumplimiento de la promesa que te hicieron, ¡hala!, te cortan la llamada; a mí me ha pasado más de una vez, y vuelves a marcar y tienes que repetir otra vez toda la historia y con muuuucha suerte, pues a lo mejor das con alguien que te comprende y te explica el porqué no pueden hacer nada: “Es muy sencillo –te dicen con esa voz tan profesional que tienen algunos, tanto, que hay veces que te crees lo que te dicen y todo, y piensas que algunos son más políticos que los propios idem- Doña Fulanita, la culpa no es nuestra es de la Compañía donde usted tiene ahora el teléfono que no nos quiere dar la portabilidad de su número” y yo pregunto qué rayos es eso. Y otra vez te responden que es muy sencillo, que no quieren traspasar la línea de teléfono hasta no agotar todo el tiempo para cobrar otro recibo más.

O sea, que hablando en plata, que no quieren soltar al cliente y que te tienen agarrada por los… “cables” hasta que les parezca que ya está bien y te liberen. Y yo me digo, jolín, que no van a perder tanto por un solo cliente, caray, ni que fuera una OPA hostil o algo parecido.

Ahora que ya me he despachado a gusto y cambiando de tema, quería comentarles, para terminar este intento de artículo -porque hoy no sé muy bien como llamar a éste churro que me ha salido, intentaré compensarles en el próximo-, bueno, que el otro día ví un reportaje que me llamó la atención; hablaban de lo agresivas que se vuelven las personas cuando se sientan al volante de un coche, y que sin embargo esos mismos cuando van andando por la calle son en general seres pacíficos. Y yo me digo, pues menos mal, porque me imagino a todos los peatones cuando se van cruzando por las aceras picándose unos contra otros porque el que viene detrás de ti te pasa por este lado o por el otro o porque corre más que tú, o cuando chocas con alguien, huy, a ustedes nunca les ha pasado eso de que alguien que viene enfrente se para delante de ti para no chocar, tú también te paras y que si uno echa a andar para un lado y el otro también, y ¿qué pasa al final?, que acabas chocando, mucho o poco, pero el roce de codos o algo más no te lo quita nadie, y murmuras perdón y hay quién se pone colorado y, a mí la verdad es que en esas situaciones me da la risa, me da como una risa tonta y me siento un poquitín ridícula. Pues menos mal que reaccionamos así, porque si lo hiciéramos como los conductores cuando tienen un choque por leve que sea, que empiezan a soltar tacos y voces y casi a llegar a las manos a veces, ayyy, si nosotros “los de a pie” les imitáramos andaríamos “cascándonos manporros” a cada rato. ¡Jesús, qué horror! Da grima sólo de pensarlo. O, pongo por caso, un señor que va con un carrito o una silla de niño paseando por la calle y otro que le adelanta porque tiene más prisa, fíjense si el primero se picara y acelerara el paso y el segundo se picara más y echara a correr…

Buenoooo, sería cómico y tremendo a la vez, no les parece.

En fin, que ya no les aburro más con mis cuitas, que bastantes tendremos estos días con las de los políticos, porque cuando empiezan a ponerse verdes unos a otros…, amigos míos… ¡Lo que hay que oír…!

Emma Rosa

viernes, 4 de mayo de 2007

ENTRE LA VIDA REAL Y LA REAL VIDA

Otra vez estoy aquí para cotillear un poco. ¿De qué? Pues la verdad es que no sé muy bien por donde empezar, como siempre, se oyen y se ven tantas cosas que una no sabe a qué dar prioridad a la hora de comentar.

Bueno, pues estos días se habló muuuucho y “lo que te rondaré morena” del nacimiento real, o ¿será del Real nacimiento? Ay, no, que éste suena como a fútbol o a toros o algo así… Ustedes ya saben a quién me refiero, seguro. Pues sí, ya nació otra princesita más en nuestra querida España, y yo me alegro por ello, pero no porque sus padres sean los Príncipes o los futuros Reyes, no, sino porque son una pareja joven que se quieren y que tienen derecho a ser felices, con o sin perdices. Y ¿que viven del cuento? que dicen algunos, pues la verdad es que yo no sé muy bien de lo que viven, pero en todo caso no me cambiaría por ellos, eso de tener cada minuto del día programado no va conmigo, oigan, que yo pienso que debe ser muy duro eso de no poder ir o hacer nunca, o casi nunca, lo que te dé la real gana, y nunca mejor dicho, ¡caray!, y aguantando los rollazos que tienen que aguantar a veces. ¡Uffff!, yo, a veces, cuando les veo en esos desfiles interminables o en esas aburridas cenas y en los “besamanos” pienso: ¿Y si ahora les da un apretón o tienen un ataque de gases o algo así? ¡Buhhh!, quita, quita, esa vida para quien la quiera, mejor ser maruja que Princesa, por mucho que se viva del cuento.

Cambiando de tema, otro notición de hoy, recién fresquito, vaya, la detención de la Pantoja, cotilleo puro y duro, ya lo sé, la verdad es que a mí, eso ni me va ni me viene, (“que me la trae al pairo” que diría quien yo me sé y ella ya sabe quien es, creo), bueno, pues eso, pero yo vivo en el norte de ésta, nuestra España, si viviera en Marbella seguro que me importaba mucho más, aunque, claro, si tenemos en cuenta que horas antes nuestro Presidente en un mítin en esa misma ciudad habló de la corrupción y de que se iba a detener a todo bicho viviente por muy famoso que sea y que esté imputado en el asunto, pues, ¿qué quieren que les diga? Demasiada casualidad ¿o no? Vaya, si parecía que estaba anunciando algo vital para el país. Luego no me extraña que salga al quite el Acebes y que argumente que con este asunto se está tratando de despistar la atención de la gente de otras cuestiones bastantes más importantes. Pues mire por donde, Sr. Acebes, no es que usted sea santo de mi devoción, pero en este caso tengo que darle la razón, que creo yo que sí, que la tiene, y que esta vez ha estado usted muy sagaz, “a Dios lo que es de Dios y…”, que yo no me caso ya con nadie, sea del Partido que sea, que ya lo hice hace muchos años y de momento estoy servida.

Ah, para terminar, que vean ustedes que yo también estoy muy puesta en cultura: La lástima es que pillé sólo un ratito de la conversación y ése sí fue de casualidad, fue breve, pero muy sabroso, estaban entrevistando a Antonio Gala, y cuando el presentador le preguntó sobre los guiones que había escrito para cine, concretamente para una película de Raphael y otra de Sara Montiel, la verdad es que me quedé alucinada cuando escuché eso, jamás lo hubiera pensado de todo un señor tan serio y tan docto él; pues ¿qué creen que hizo el escritor? No se achantó ni nada parecido, se limitó a encogerse de hombros y dijo simplemente: “que había que pagar el piso”; después le dio la vuelta a su bastoncito y se bebió un trago de algo de una taza y esperó la siguiente pregunta.

¡Vaya!, resulta que estos “peces gordos” de la literatura que presumen de que escriben casi para minorías y critican a los escritores que venden novelones para lucrarse fácilmente, ellos también caen o cayeron en su día en las garras de la tentación y “se rebajaron” a escribir cualquier cosa con tal de ganar dinero, eso sí la excusa de la hipoteca es una buena excusa, verdad usted, señor Gala…

¡Ay, Señor!... A veces lo que hay que oír…

Emma Rosa